LA GUERRA EN EL CONGO

CARTA ENVIADA POR JUAN SÁEZ, MI PRIMO DE ALBACETE.

Ante la situación de guerra declarada que está viviendo el Este del Congo, que empeora por momentos, y las informaciones recibidas directamente de la región especialmente por nuestros amigos, el Comité de Madrid pensó en una acción urgente de denuncia.

Os enviamos este escrito para:

- Mandarlo a los medios de comunicación con quien estáis en contacto, convencionales y alternativos

- Enviarlo a todos los grupos y personas que puedan hacerse eco de esta situación.

- Para colgar en webs y blogs

Hay que hacer todo lo posible para denunciar la postura irresponsable de la comunidad internacional.

Dos batallones rwandeses invaden territorio del Congo

El día 26 de octubre un numeroso contingente del ejercito Rwandés ha atacado la base congoleña de Rumangabo, que ya había sido atacada la semana pasada y que había causado mas de cien muertos en las tropas del ejercito gubernamental congoleño. Esta acción fue denunciada la semana pasada en la ONU por el jefe del gobierno congoleño: J. Kabila

El conflicto entre el Congo y Ruanda, quien financia guerrillas como el CNDP de L. Nkunda, se debe a la posesión de las numerosas minas de coltan, casiterita, diamantes, wolframita de las provincias congoleñas de los kivus. Hasta este momento, el mayor beneficiario de estas minas es Rwanda, pero las nuevas leyes que empezaran aplicarse a partir del 2009, pueden revertir la situación.

Las nuevas leyes anularan todas las licencias de posesión y transporte de casiterita e impedirán el transito de casiterita por la frontera a no ser que se haya transformado en el Congo. Esto podría afectar a la mayor parte de los poseedores de las minas y compañías de transporte de los minerales, congoleños de origen ruandés y también perjudicar a las plantas en Ruanda, en Gisenyi, de transformación de la casiterita. Una leyes similares se aplicaron hace un año en Katanga (Congo), que afectaron a las minas de cobre y cobalto.

Mientras el coltan ha bajado bastante en el mercado internacional desde el año 2001, la casiterita (estaño) ha experimentado desde el año 2004 un acusado incremento debido a la nuevas leyes medioambientales emitidas por la Union Europea y Japón, donde el estaño sustituirá y se empleara en exclusiva para todo tipo de soldaduras. El Congo posee un tercio de las reservas mundiales de casiterita

De hecho muchas de las ofensivas de las guerrillas pro-ruandesas de L Nkunda han tenido como objetivo el control de las minas mas importantes de casiterita en el Congo: las minas de Bisie, situadas en Walikale (Kivu Norte). Este fue el objetivo en la ofensiva de L Nkunda que tomo Bukavu en el año 2004 y también es el objetivo de los combates actuales donde se intenta controlar zonas de transito o bloquear otras zonas de transito, para que la casiterita vaya a Ruanda.

La situación se parece cada vez mas a la que se produjo en la segunda guerra del Congo, que causo cinco millones de muertos, pues el jefe del gobierno congoleño ya ha obtenido la promesa de varios países de la asociación de países del cono sur africano (SADC) de acudir en su ayuda en caso de una invasión ruandesa. Esta nueva etapa del conflicto enfrentara al actual presidente del Congo, ayudado por países del cono sur africano, frente a Ruanda y Uganda, ayudados masivamente por los países occidentales.

Las multinacionales mineras de numerosos países occidentales se benefician de los recursos minerales del Congo, pues una gran parte de los minerales extraídos en las selvas de las provincias de los Kivus son transportados y pasados clandestinamente a Ruanda o Uganda donde son comprados a bajo precio por las multinacionales. El apoyo de Estados Unidos a las guerrillas pro-ruandesas ha sido ya denunciado y se llevaría a cabo por medio de USAID.

El papel de los servicios secretos occidentales de ayuda al bando de Ruanda se plasma en tratar de que aparezca el conflicto como una lucha interna congoleña, provocada por el descontento hacia el presidente J Kabila, para ello emplean su gran influencia en las organizaciones de derechos humanos y también en las organizaciones europeas de izquierda que tratan temas africanos, donde promocionan la carrera de activistas nacionalistas africanos que mantienen esas ideas.

De hecho, todos los intelectuales africanos que han denunciado las grandes evidencias de la implicación de Estados Unidos en la guerra del Congo y en los posteriores conflictos, han sido relegados al ostracismo incluso por las organizaciones de izquierda europea.